Hitos en salud mental:

El camino al bienestar emocional

Para cada persona será diferente, pero en el camino del bienestar emocional algunos de los hitos en salud mental más significativos y compartidos son los siguientes.

La primera vez que te pediste ayuda.

Porque el primer paso es el más difícil, y pedir ayuda es necesario para comenzar el camino. Quizás la primera vez no fue la que conseguiste la ayuda que querías, o conseguiste expresarte cómo necesitabas. Pero ya lo tienes claro: «Necesito ayuda, ya no puedo más» «Quiero un cambio, y no sé cómo lograrlo»

La primera vez que te atreviste a contarle a alguien cómo te sentías.

Y te abriste con esa persona, que quizás era alguien de confianza o quizás las palabras salieron a borbotones de tu boca, como un manantial. Probablemente esa persona no es Superman o Superwoman, y sepa escucharte, acompañarte y ayudarte cómo necesitas. O quizás sí.

Pero al menos ya fuiste consciente de que hay mucha gente que podría ayudarte en tu entorno, cada una a su manera. Y puede que alguna te recomendara una profesional de confianza.

La primera vez que hablaste con una psicóloga

Y te atreviste finalmente a hacer esa llamada o mandar ese correo para solicitar ayuda profesional. Llamar a una psicóloga para que te ayude era ese gran paso que necesitabas en tu camino del cambio.

El primer día en terapia sería de toma de contacto, pero pronto comprendes que no es como una charla de amigos. El proceso terapéutico es un camino de autodescubrimiento personal, donde una profesional en la conducta humana te guiará y aportará herramientas que te permitan avanzar y enfrentarte a tus problemas. Hasta lograr ese bienestar emocional que anhelas.

Ya sea mediante Terapia Presencial cómo mediante Terapia Online, en Corio Psicología te ofrecemos la psicoterapia que te mereces.

La primera vez que te perdonaste a ti misma

Y aunque sabes a nivel racional que nadie somos perfectos, fuiste capaz de aplicar compasión hacia ti misma. Una manera de autocuidarse es ser capaz de reconocer los errores, comprender que el pasado no se cambia, perdonarnos a nosotras mismas.

Y una vez que nos hemos perdonado, podemos dar un paso adelante para aplicar lo que hemos aprendido para hacerlo la siguiente vez mejor.

La primera vez que alguien comprendió  realmente tu dolor

Es difícil de explicar, pero pese a que la gente de tu entorno lo intentaba parecía que nadie conseguía llegar a ese lugar tan distante donde estaban tus sentimientos. Pero conforme avanzó el proceso terapéutico, te conociste mejor y tus herramientas de comunicación mejoraron. Y un día ¡Tachán! sentiste que alguien por fin comprendió tu dolor.

La primera vez que te sentiste bien a solas contigo

Durante mucho tiempo evitaste de manera inconsciente estar contigo misma a solas. Evadiéndote con series, películas, fiestas, exceso de trabajo, videojuegos o cualquier otra estrategia de evitación. Porque cuando te quedabas a solas contigo misma parecía que un manto negro de emociones se cernían sobre ti.

Y un día, cuando menos te lo esperas descubres que puedes estar bien contigo misma a solas. Dando un paseo, tomando un café o en cualquier otra circunstancia. Porque durante la terapia has hecho un largo viaje contigo misma y te valoras cómo lo que eres: una persona completa, valiosa y merecedora de amor.

Te atreviste a ser tú misma

Hasta llegar a brillar con tu luz propia. Donde te sientes bien contigo misma, sabes cómo alcanzar todo tu potencial y ahora eres capaz de aportar a todo el entorno que te rodea. Con la distancia, ahora ves cómo todos estos hitos en la salud mental te han ido marcando el camino. Ese día en el que piensas que todo el esfuerzo ha merecido la pena ahora que puedes verlo desde la cima de la montaña.

¿Te animas a comenzar tu camino?

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