¿Te has encontrado a ti misma/o comparándote con otra gente en Instagram o Facebook? ¿O andando por la calle y pensar esa persona es más guapa/fea/inteligente/exitosa que yo?. Pues si te has preguntado de dónde viene ese impulso quizás deberías echarle un vistazo a la Teorías de comparación social del psicólogo León Festinger, (Festinger, 1954). Esta teoría nos plantea que los seres humanos tenemos una necesidad constante de evaluar nuestras habilidades y opiniones, y una de las maneras que utilizamos para hacerlo es compararnos con otras personas.

«Comienza a valorar lo que tienes como persona única que eres, y lo que puedes llegar a ser en potencia.»

Autoestima y comparación social

Autores posteriores (Wills, 1981) desarrollaron los conceptos de comparación ascendente y descendente (en función de si nos comparamos con gente que está mejor o peor que nosotros). Y al hacerlo no solo aprendemos nuevas cosas, sino que afectamos a otros elementos como la autoestima. Pero a la vez, el estilo de comparación que tenemos nos habla de nuestra autoestima: pues la gente con autoestima más baja tiende a hacer comparaciones con gente que está peor que ellas (Aspinwall & Taylor, 1993). O como comentaba una amiga: cuando estaba de bajona se ponía los programas de salsa rosa para compararse con gente que estaba peor que ella.

PD. No puedes evitar compararte, pero elige con quien. Haz una buena ensalada variada de personas con las que comprarte y utilízalo para mejorar, no para denigrarte. Y si quieres mejorar tu autoestima comienza a valorar lo que tienes como persona única que eres, y lo que puedes llegar a ser en potencia.

Referencias